Los padres de Joaquín Sebastián Puig, el niño de seis años que fue arrollado por un camión en la tarde del martes en un barrio ubicado en el cardinal oeste de la ciudad de Recreo, hablaron con Diario UNO. Juan Sebastián Puig tiene 42 años y su esposa, Iris Mariel Valdez de Puig, 36, son padres de seis hijos y hoy están en el hospital de Niños de Santa Fe esperando que Joaquín se recupere.
Al salir este jueves de la visita en terapia intensiva, donde se encuentra el pequeño, su papá dijo a Diario UNO que nota una pequeña recuperación que aviva su esperanza: "Yo le toque la mano y se movió", contó. En el día de ayer los papás contaron que: “Nosotros nos enteramos de lo que pasó con nuestro hijo Joaquín Sebastián algunos minutos después de las 18, ya que sus hermanos nos vinieron a avisar y nos dijeron que Joaquín estaba jugando con un grupo de chicos en la calle, más precisamente en la esquina de 30 de Abril y San Martín y nosotros tenemos dos versiones del suceso”. “La primera es que Joaquín con el resto de los chicos jugaban a tratar de pasar por debajo del camión cuando éste estaba en movimiento y ésa fue la razón por la que cuando lo intentó, una cubierta trasera del vehículo que estaba más levantada que las otras, fue la que lo golpeó y le pasó por encima”. “La otra versión sobre el mismo suceso, que está a mitad de camino entre lo que dijeron los vecinos del barrio y los chicos que estaban jugando con Joaquín, es que en realidad jugaban a colgarse en la parte trasera de los vehículos en movimiento y en esas particulares circunstancias fue cuando se produjo el accidente”, contaron los padres. Además, hicieron particular hincapié en que el nene salió de la casa en un descuido y fue en ese momento cuando se produjo el accidente por parte del conductor del camión, que cuando escuchó los gritos de los chicos y de los vecinos del barrio detuvo la marcha del vehículo y se sumó al vecindario para prestar ayuda al nene herido. Trasladado en una ambulancia
Y siguieron contando: “Después, la policía de Recreo arribó al lugar, pidieron una ambulancia que llegó inmediatamente y todos nos fuimos al hospital protomédico Manuel Rodríguez, y si bien nuestro hijo estaba muy dolorido por los golpes, todavía estaba lúcido. Luego los profesionales, por la complejidad de las heridas internas que tenía el nene, decidieron que otra ambulancia lo traslade al hospital de niños Orlando Alassia, adonde llegamos el martes cerca de las 20, y el nene ya estaba desvanecido. Nosotros fuimos informados en todo momento por el plantel médico del hospital Alassia; ellos nos hicieron saber que el estado de Joaquín es crítico, que va a seguir internado por lo menos una semana más en observación, y que los hematomas internos son el cuadro más complicado que presenta. Así que nosotros estamos expectantes ante la evolución en la salud de nuestro hijo”.
Juan Trento (Diario UNO)
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